Explicar el diagnóstico de autismo a tu hijo puede ser un proceso desafiante y delicado. A menudo, los padres sienten miedo, inseguridad o no saben cómo abordar el tema para que el niño se sienta comprendido y apoyado. A medida que los niños crecen, pueden empezar a notar diferencias entre ellos y sus compañeros. Contarles sobre su diagnóstico de autismo de una forma empática y clara les permite conocerse mejor y afrontar el mundo con una perspectiva positiva sobre su identidad.
En este artículo, exploraremos cómo puedes preparar esta conversación, qué aspectos es importante mencionar y algunas estrategias prácticas para que tu hijo se sienta comprendido y acepte su diagnóstico con confianza.
¿Por qué es importante hablar del diagnóstico de autismo con tu hijo?
Beneficios de la autocomprensión y autoestima
Cuando un niño comprende su diagnóstico de autismo, puede comenzar a desarrollar una autocomprensión más profunda. Entender por qué percibe y responde al mundo de forma única puede ayudarle a construir una autoestima saludable. Muchos niños en el espectro se sienten diferentes o desconectados de sus compañeros. Al conocer su diagnóstico, pueden entender que no hay nada «malo» en ellos; simplemente tienen una manera distinta de experimentar el mundo.
Reducción de la ansiedad y la confusión
La falta de conocimiento sobre su condición puede generar confusión, ansiedad y sentimientos de rechazo. Explicar el diagnóstico de autismo puede ayudar a tu hijo a poner en contexto las situaciones difíciles que vive y a reducir los niveles de ansiedad.
Fomento de la independencia
Conocer el diagnóstico de autismo también les permite a los niños aprender a abogar por sí mismos. Si entienden sus fortalezas y desafíos, es más probable que busquen herramientas y apoyo para facilitar sus interacciones sociales, académicas y emocionales.
¿Cuándo es el momento adecuado para hablar del diagnóstico de autismo con tu hijo?
Edad y nivel de madurez
No hay una «edad ideal» universal para todos los niños; el momento adecuado depende del nivel de madurez del niño y de las preguntas que esté empezando a hacerse sobre sí mismo. Algunos niños pueden preguntar a una edad temprana por qué tienen terapia o por qué se sienten diferentes a otros niños. En estos casos, podría ser el momento adecuado para iniciar la conversación de forma sencilla y gradual.
Señales de que tu hijo está listo para saber más
- Pregunta sobre sus diferencias con otros niños.
- Expresa frustración o confusión sobre su forma de sentir o responder a situaciones.
- Muestra interés en su desarrollo o en los motivos por los cuales asiste a terapias o programas especiales.
Adaptar la conversación al contexto y a las necesidades del niño
Cada niño es único, por lo que la conversación debe adaptarse al contexto de su vida diaria y sus necesidades personales. Si tu hijo es verbal y tiene una buena comprensión del lenguaje, puedes emplear una conversación más directa. Si no es verbal o tiene dificultades para comprender ideas abstractas, puedes valerte de historias visuales o metáforas simples.
Estrategias para explicar el autismo a tu hijo
1. Utiliza un lenguaje simple y positivo
La forma en que explicas el autismo es fundamental. Usa un lenguaje sencillo y adecuado para su edad, evitando palabras complejas o diagnósticos médicos difíciles de entender. Por ejemplo, en lugar de decir «neurodiversidad» o «trastorno», puedes hablar de «diferencias en el cerebro».
Ejemplo:
“Sabes, todas las personas tienen cosas que se les dan mejor y cosas que les cuestan un poco más. Tú tienes una forma especial de ver el mundo, y eso es algo que te hace único. A eso le llamamos autismo.”
2. Resalta las fortalezas y habilidades especiales
En lugar de centrarte en las limitaciones, enfócate en las habilidades y talentos que puede tener tu hijo. Muchos niños con autismo tienen una gran atención a los detalles, una memoria sorprendente o habilidades especiales en temas específicos como las matemáticas o el arte. Esto les ayudará a valorar su diagnóstico como una parte positiva de su identidad.
Ejemplo:
“Tienes una forma especial de recordar cosas o de fijarte en detalles que otros no ven. Esto es algo muy valioso.”
3. Utiliza metáforas o analogías
Las metáforas pueden ser útiles para explicar conceptos complejos de una manera que los niños entiendan fácilmente. Por ejemplo, puedes explicar que el autismo es como un sistema operativo diferente en una computadora.
Ejemplo:
“Es como si tuvieras un tipo de software diferente al de otras personas. Algunos niños usan un programa y tú usas otro. No es mejor ni peor, solo es diferente, y eso hace que algunas cosas sean más fáciles para ti y otras un poco más difíciles.”
4. Lee libros o muestra videos educativos
Existen muchos libros y recursos diseñados específicamente para explicar el autismo a los niños. Estos materiales suelen tener un tono positivo y están adaptados para diferentes edades. Los videos animados también pueden ser una excelente herramienta visual.
Algunos libros recomendados para niños sobre el autismo son:
- “Mi hermanito de la luna” de Frédéric Philibert
- “Todos tenemos algo que decir” de Pedro Pablo Sacristán
- “Soy diferente, soy como tú” de Gretchen Kelleher
5. Dale tiempo para asimilar la información
Es probable que tu hijo no comprenda el diagnóstico de inmediato, y puede necesitar tiempo para procesar lo que significa. Permite que haga preguntas a su propio ritmo y respóndelas con paciencia y sinceridad. Hazle saber que siempre puede hablar contigo sobre cualquier duda o preocupación que tenga.
6. Refuerza el mensaje de que es amado y aceptado
Es esencial que tu hijo sepa que su diagnóstico no cambia el amor que le tienes ni la forma en que lo valoras. Asegúrate de que sienta tu apoyo en todo momento y transmítele el mensaje de que el autismo es solo una característica más que lo hace único y especial.
Ejemplo:
“Lo más importante para nosotros es que te amamos tal como eres. El autismo es solo una parte de ti, y estamos aquí para ayudarte en lo que necesites.”
Responder preguntas comunes que puede tener tu hijo
Al hablar sobre el diagnóstico, es probable que tu hijo tenga algunas preguntas. Aquí te damos ejemplos de cómo responder a algunas de las preguntas más frecuentes que podría tener.
¿Por qué soy diferente a otros niños?
Puedes responderle de manera simple:
“Todos somos diferentes, y eso es lo que hace que el mundo sea interesante. Tú tienes algunas formas especiales de pensar y sentir, y eso te hace único.”
¿Voy a estar bien? ¿Voy a mejorar?
Es importante ser honesto, pero optimista:
“El autismo siempre será parte de ti, pero con el tiempo aprenderás a manejar las cosas que te cuestan más. Y estamos aquí para ayudarte en lo que necesites.”
¿Mis amigos también tienen autismo?
Puedes ayudarlo a ver que el autismo es solo una de las muchas formas en que las personas son diferentes:
“Algunos amigos pueden tener autismo y otros no. Todos tenemos cosas en las que somos buenos y cosas que nos cuestan un poco más.”
Conclusión
Explicar el diagnóstico de autismo a tu hijo puede ser un proceso lleno de desafíos, pero también puede ser una oportunidad para fortalecer el vínculo entre ustedes y para que tu hijo desarrolle una autoimagen positiva. A través de una comunicación clara, sencilla y basada en el amor, puedes ayudar a tu hijo a entender su diagnóstico como una parte integral de su identidad, valorando sus fortalezas y construyendo una base sólida para su autoestima y confianza en sí mismo.
Recuerda que la información debe ser transmitida en partes que pueda comprender y procesar, y que esta conversación probablemente será solo la primera de muchas. Con paciencia y amor, tu hijo podrá aprender a aceptar y celebrar quién es.
Preguntas frecuentes
¿Cómo saber si mi hijo está listo para hablar sobre su diagnóstico?
Es probable que tu hijo esté listo si empieza a hacer preguntas sobre sus diferencias con otros niños o si expresa frustración ante algunas situaciones sociales o escolares.
¿Qué hago si mi hijo reacciona mal o con tristeza al conocer su diagnóstico?
Es normal que los niños puedan tener reacciones variadas al conocer su diagnóstico. Permítele expresar sus emociones y dale tiempo para procesar la información, recordándole siempre que es querido y apoyado.
¿Es recomendable hablar sobre el autismo de mi hijo con sus amigos o en la escuela?
Esto depende de las preferencias y el nivel de comodidad de la familia. Puede ser útil si se considera que la comunidad escolar estará mejor preparada para apoyar a tu hijo.
